Según un estudio realizado por el IFPRI (International Food Policy Research Institute), solo el 13% de la población argentina consultada consumió los cinco elementos básicos de la pirámide alimenticia. Las consultas médicas a los nutricionistas aumentaron y los aspirantes para estudiar nutrición, también. ¿Cuál es la explicación para este fenómeno? Enterate en este artículo.

La relación entre nutrición y salud es obvia, sin embargo el cómo llevar a cabo un buen vínculo entre ambas no lo es tanto. Tan es así que la mala alimentación alcanzó un pico preocupante en la Argentina que, al tiempo de subir la cantidad de consultas médicas, también demandó más profesionales que asistan en este rubro.

Los auxiliares de nutrición, como todas aquellas capacitaciones vinculadas con nutrición, están en pleno auge. Esto es así porque, sobre todo en la pandemia, el consumo de harinas y azúcares superó la media normal, como consecuencia de que las personas se quedaron en sus casas y comenzaron a “picotear” en distintos horarios del día.

Para los médicos, los malos hábitos alimenticios son preocupantes, pero aún más inquietante es que aquellos que quieren cuidar su salud y su peso se vuelcan por una mala alimentación, de todos modos. 

En parte, porque desconocen la pirámide alimenticia. Pero también porque consumen ciertos productos que, aunque dicen ser dietéticos o bajos en azúcares y sodio, no lo son. Pero peor aún, no todos saben o no quieren investigar qué contiene lo que están comiendo.

¿Por qué estudiar para Auxiliar de nutrición?

El tema de la mala alimentación está tratado por todos los costados, pero no así la formación de profesionales para este campo quienes son cada vez más demandados para dar respuesta a las necesidades de la sociedad.

Los auxiliares de nutrición acompañan a los profesionales de esta área en temas relacionados con la salud, estética y hasta en prácticas deportivas, de manera de guiar a las personas hacia un consumo adecuado y responsable de los alimentos.

Entre los conocimientos que manejan, se encuentran:

  • Todo lo relacionado a las propiedades de los alimentos y su impacto en el organismo.
  • Requerimiento nutricional acorde a la actividad y forma de vida de las personas. 
  • Elaboración de menús.
  • Conocimientos sobre los diferentes métodos de cocción y conservación de alimentos.
  • Manejo de los principios de la nutrición.
  • Reconocimiento de enfermedades transmitidas por los alimentos. 

Los cursos de auxiliar de nutrición tienen una amplia salida laboral porque no solo es posible trabajar junto a un profesional de la salud, sino además en centros de estética, deportivos y de salud, siendo un complemento cada vez más necesario para la atención temprana de casos de obesidad e intoxicación, y sus consecuencias.

Basta con ver los números que resultaron de la última encuesta realizada por el Ministerio de Salud de la Nación para tomar el asunto con mayor premura:

6 de cada 10 adultos sufre de exceso de peso.

30% de los niños tienen sobrepeso.

6% están obesos.

Mientras que el INDEC afirma que el 45% de la población es hipertensa, la Sociedad Argentina de Nutrición presentó un informe que asegura que, al menos, el 78% de los argentinos aumentó de uno a 3 kilos, mientras que el 3% aumentó más de 5 kilos.

¿Qué hacer en caso de sobrepeso?

Lo recomendable es consultar a un médico y evitar las recetas que se comparten por Internet o en grupos de WhatsApp. Mientras se lleva a cabo la consulta con un profesional de la nutrición, también es recomendable consumir los cinco nutrientes esenciales de la pirámide, que son:

  1. Verduras y frutas.
  2. Legumbres, cereales, papa, pan y pastas.
  3. Leche, yogur y queso.
  4. Carnes y huevos.
  5. Aceites, frutas secas y semillas.

Además de ingerir agua y realizar actividad física a diario, intentando eliminar el exceso de sal, azúcar y grasas en la dieta cotidiana.

Todas estas recomendaciones deberán ser guiadas de la forma correcta por un Auxiliar de nutrición, en base a una indicación médica que responda al organismo de cada persona.