¿Es posible unir un amor tan fraternal como el que algunos tienen por las mascotas con sumar una oportunidad laboral? Claro que sí, esta es la razón por la que cada vez más mascoteros eligen hacer los cursos de Auxiliar de veterinaria. Te contamos todo en este artículo.

No importa cuál sea tu profesión real, para la cual te preparaste, o cuál es la actividad laboral que estás ejerciendo porque los caminos de la vida te llevaron hasta ese lugar. Cuando el amor por tus mascotas es muy fuerte no sólo lo expresás por las que están en tu casa, sino también ayudando a otros, y es por eso que cada vez más personas están interesadas por hacer cursos de Auxiliar de Veterinaria.

“El cuidado de las mascotas es una responsabilidad que no sólo nos compromete éticamente, sino también desde el corazón”, nos cuenta María Belén quien después de hacer la capacitación como Auxiliar de veterinaria se animó a realizar el ingreso a Veterinaria. 

“Yo sentía la vocación con mis perros, todos adoptados, pero después me di cuenta que podía hacer más por el cuidado de las mascotas, podía hacer cursos sobre mascotas y aprender, entre otras cosas, las técnicas de primeros auxilios con mascotas”, agrega María Belén cuando le consultamos sobre qué la incentivó a iniciar su formación con una capacitación corta y online.

Del tiempo libre al tiempo con amor

Así como nos compartió María Belén su experiencia, una camada de nuevos egresados salieron a luz el año pasado en la Escuela de Veterinaria de Ficde en Córdoba, en donde quienes concurrían a la capacitación estaban mayormente incentivados por el amor que tienen por los animales.

En muchos casos, la gente empieza por averiguar dónde estudiar veterinaria y cuando analizan el tiempo que les llevará hacer una carrera se desaniman y lo dejan de lado. Salvo las personas que tienen como objetivo ser veterinarios, los demás quedan en el camino con la intención guardada en sus corazones.

Sin embargo, no es necesario ser veterinario para ayudar con el cuidado de las mascotas, ya que, como nos lo compartió María Belén, existen otros tantos roles necesarios en una clínica veterinaria, inclusive en un petshop.

Así es como se fueron incorporando nuevas modalidades de capacitación a distancia, online o presencial, pero cortas y adaptadas para las personas que también estudian, trabajan o tienen responsabilidades familiares que no le permiten hacer una carrera universitaria completa.

“Para mí, el tiempo que dediqué a la realización del curso de Asistente Veterinaria fue tiempo de amor”, agrega María Belén tras explicarnos que trabajaba nueve horas diarias y por esa razón no podía ir a la universidad, pero que la opción de estudiar online le abrió las puertas a una salida laboral totalmente gratificante en donde está mucho más conectada con sus emociones respecto a las mascotas, que con sus necesidades.

La salida laboral de un Auxiliar de Veterinaria y sus funciones

Si bien el amor por los animales moviliza a muchas personas a prepararse como asistente de veterinaria, otras tantas personas están buscando un nuevo horizonte profesional con una salida laboral prometedora. 

Los cursos de auxiliar de veterinaria se han convertido, de un tiempo a esta parte, en un segmento muy requerido debido a la creciente atención de los animales, a la predisposición social a adoptar a las mascotas en situación de calle y a una tendencia a estar más atentos a la salud de los mismos.

Es así como, un asistente de veterinaria podrá desempeñarse tranquilamente en clínicas, hospitales veterinarios, organizaciones de protección animal, peluquerías caninas y felinas, fundaciones de asistencia a los animales en situación de calle, veterinarias, pet shops, etc.

La preparación como ayudante de veterinaria brinda las herramientas necesarias como para llevar adelante el ejercicio profesional de este nuevo perfil cada vez más necesitado en el área.

Las responsabilidades que tienen los ayudantes de veterinaria pueden ser desde administrativas, atención de animales en petshops, cuidado de mascotas o asistencia en un cirugía, o en equipos profesionales como organizaciones o zoológicos.

Las capacitaciones que unen el amor, la vocación y la profesionalización cada vez se están haciendo más lugar en un mundo que, para algunos, está deshumanizando. Estos espacios de aprendizaje son la muestra real de que no todo se traduce en la desesperación por estar dentro del mercado laboral, sino que se puede amar un oficio y hacer de él una forma de vida.